«El amor de Jesús es inmenso y no decepciona»

Léonie Ngabo, congolesa, deja en este vídeo el testimonio de su vocación. Actualmente, tras un año de vida religiosa, vive en Madrid, su primer destino en el Instituto de Religiosas de San José de Gerona.

De sus padres, de creencia cristiana, aprendió que solo Jesús respondería a sus preocupaciones y daría sentido a su vida. Sentía la necesidad de tener a sus familiares y amigos enfermos o en situación de vulnerabilidad en sus oraciones. Y sentía que su amor hacia ella era inmenso.

Su vocación surge como respuesta a este gran amor que le daba. Al principio, sintió dudas, hasta que decidió esta elección, diferente a la de sus hermanos y hermanas y amigos. Le impulsó la alegría de pertenecer a él, “que es amor fiel y nunca decepciona”, dice.

“Desde que empecé este camino -añade- nunca me he sentido sola; tanto en mis alegrías como en mis penas, Jesús siempre está presente». Aquí ha encontrado su verdadera felicidad, viviendo la vida que ha deseado, en Comunidad, «como una gran familia».

Ella invita a los jóvenes a estar atentos a los signos de Dios y abrir la puerta cuando llama a sus corazones.